Estamos rodeados de productos, ropa y comida que requieren mucha agua para fabricarse. Para medir el consumo del agua existe un método: la huella hídrica. De esta manera, podemos controlar este factor y crear conciencia sobre el volumen de agua que requieren los procesos de producción y los hábitos de vida. Esta herramienta nos permite saber qué tan conveniente es que el ser humano siga consumiendo tanta agua, ya que es el elemento del que dependen todas las formas de vida de la Tierra y cada vez es más escasa.
¿Quieres contribuir a mejorar este problema causado, en parte, por el cambio climático? Formarte en huella de carbono y huella hídrica puede ser una buena manera de empezar. O, sigue leyendo para que aprendas más del tema.
Índice de contenidos
¿Qué es la huella hídrica?
Es un indicador medioambiental que tiene el objetivo de medir el volumen de agua dulce que se utiliza durante la cadena de producción de un producto o servicio. Los problemas medioambientales como el cambio climático y la contaminación, nos recuerdan cada día que no podemos seguir consumiendo agua a este ritmo e irracionalmente. La sociedad debe actuar para frenar esta situación. Por eso es fundamental medir y hacer el seguimiento del consumo de agua, lo que implica conocer la huella hídrica asociada.
Indicadores de la huella hídrica
Se compone de tres elementos según de dónde procede el agua:
- Huella hídrica verde: se refiere al agua de precipitaciones, de la lluvia y de la nieve. Esta agua se queda almacenada en la tierra y se evapora o se incorpora a las plantas. Es importante para productos agrícolas, hortícolas y forestales.
- Huella hídrica azul: se trata del agua que proviene de subterráneos o de superficies. Este tipo de agua se evapora durante la producción de un bien o es vertida en el mar. Los sectores que pueden tener este tipo de huella son la agricultura de regadío y la industria.
- Huella hídrica gris: es el volumen de agua fresca que se requiere para diluir el agua contaminada.
¿Cómo se produce?
Para calcularla tenemos que medir el volumen de agua utilizada en la producción de cualquier bien o servicio. Nos referimos a toda el agua, no solo la que se incorpora al producto, sino toda la que se gasta en el proceso de elaboración.
La huella hídrica viene determinada por cuatro factores:
- Volumen total del consumo: existe una relación entre el PIB de un país y su huella hídrica. Cuanto más elevado sea el valor del PIB, mayor huella hídrica.
- Patrones de consumo: los hábitos de consumo también condicionan la huella hídrica.
- Clima: los lugares con una temperatura elevada tienen mayor demanda evaporativa, ya que los cultivos requieren mucha agua.
- Prácticas agrícolas: los sitios que tienen rendimientos agrícolas bajos demuestran huellas hídricas elevadas.
Existen dos metodologías distintas para calcular la huella hídrica:
- Water Footprint Network: se centra en el agua usada en productos o servicios por un productor o un consumidor.
- UNE-EN-ISO 14046: se basa en particularizar la metodología de Análisis de Ciclo de Vida orientado al estudio de los impactos ambientales al agua.
Huella hídrica: etapas y unidades
La huella hídrica está presente en todo momento, ya que establece una relación directa entre los sistemas hídricos y el consumo humano. Este vínculo tiene su parte mala con la que puede determinar la escasez o la contaminación del agua, y su parte buena en la que puede permitir la mejora de la gestión de la producción del agua.
Como consumidores diarios de agua, aparte de intentar disminuir el consumo en casa, también debemos tomar consciencia de que algunos alimentos requieren de mucha más agua en su producción, como por ejemplo la carne.
Otro consejo que podemos aplicar es dejar de beber agua embotellada porque la producción de plásticos también supone un uso enorme de agua y mucha contaminación.
Por ello, debemos aplicar ciertas evaluaciones para conocer nuestro impacto y huella hídrica como los que te presentamos a continuación.
Fases de evaluación
- Alcance y objetivos: la evaluación de la huella híbrida empieza con la determinación de una serie de objetivos que deben establecer el alcance de las etapas posteriores.
- Fases de contabilización: esta fase se basa en recoger aquellos datos relevantes para estudiar los objetivos planteados anteriormente.
- Fase de evaluación de la sostenibilidad: es aquí donde se determina la eficiencia en el uso del recurso hídrico. La ponderación de los tres indicadores (huella hídrica azul, gris y verde) demuestran el impacto hídrico de muchos productos como la alimentación, la ropa o los materiales de construcción.
- Fase de respuesta y formulación: se centra en reducir la huella de agua implantando medidas de sostenibilidad.
¿Qué formación enseña sobre la huella hídrica?
En la Escuela Mare Nostrum Business School impartimos la maestría en huella de carbono y huella hídrica destinada a todas aquellas personas que tengan interés por este ámbito. El objetivo de la maestría es que adquieras todas las capacidades y habilidades necesarias para desarrollarte como profesional del sector.
Profundizarás en conceptos como la metodología de cálculo del ciclo de vida, la huella de carbono, la huella hídrica, los complementos de gestión ambiental, entre otros temas relacionados con este campo. Además, al final de cada unidad didáctica encontrarás unos ejercicios de autoevaluación que te permitirán averiguar tu evolución de aprendizaje y tu nivel en el sector.
Para cursar la formación recibirás acceso al Campus Virtual donde encontrarás más información sobre la metodología de aprendizaje online. También estará a tu disposición un curso de iniciación online para aprender el funcionamiento del Campus Virtual y un tutor personal para que puedas comentarle cualquier duda o problema que te surja.
¿Te atrae la idea? Consulta la oferta formativa de nuestra escuela y pide información sin compromiso.